FLORECEN SALMOS

FLORECEN SALMOS

Florecen salmos llenos de súplicas

como mazorcas de maíz que se desangran

en los desiertos desangelados, de media España,

miles de corazones rotos por los falsos elogios

de las estatuas malignas

que solo ven, en la oscuridad de una maldita caverna.

Pinturas rupestres bañadas en sangre

de pesar y de sentires humanos,

himnos y cánticos que vagan por los páramos

enamorando a zorras y liebres,

para que sus retoños, vean como el Guernica

se tiñe de colores

en una tierra habitada por tiburones,

entretanto mujeres y hombres suplican al sol un nuevo día.

Florecen del mar cantos de sirenas

con sabor almendras amargas,

mientras caen hojas de viejos nogales

al ritmo del réquiem en Do menor de “Mozart”,

haciendo que mi corazón se bata en retirada

una madrugada grisácea de otoño.

Lágrimas secas y vacías de sentimientos

son ahora la bandera de mi amor,

sintiendo como los crisantemos y las malvas

lucen en el cenotafio

en la que dormita soñando mi alma.

WILFREDO BAIXAULI BOU.- 30/11/2014

RESERVADOS LOS DERECHOS DE AUTOR